13 de diciembre de 2011

Europa: su violencia.



"Ni los indígenas americanos ni los negros africanos podrán hacer surgir Estado político alguno. Los primeros por indolencia, sumisión y subordinación. Los segundos por crueldad y salvajismo. Ambos, por ausencia de sentido moral y de inteligencia. Incapaces de libertad, parece que pueden ser esclavizados por los europeos, pues con ello se les hace un bien". Georg W. Hegel

"Sospecho que los negros, y en general todo el resto de especies humanas, son naturalmente inferiores a los blancos. Nunca hubo una nación civilizada que no fuera blanca". David Hume.


"El pueblo de los americanos no es susceptible de forma alguna de civilización. No tiene ningún estímulo, pues carece de afectos y de pasiones. Los americanos no sienten amor, y por eso no son fecundos. Casi no hablan, no se hacen caricias, no se preocupan de nada y son perezosos". Immanuel Kant



La descripción y la clasificación poseen una dimensión política. América Indígena imaginó de muy distintas maneras al colonizador territorial. Los Aztecas e Incas y algunos pueblos norteamericanos creyeron ver en el hombre blanco la realización de profecías divinas o la llegada de mensajeros todopoderosos, vínculos materializados de significados imaginados. Jamás en la historia universal había quedado de manifiesto de manera tan violenta las funciones imaginarias de las estructuras simbólicas, tanto así que es a través de los propios símbolos como agrupaciones indígenas caminan, sin saberlo, hacia su muerte.

Desde Europa los imaginarios sociales comenzaban a articularse en todas las dimensiones posibles. América era vista desde arriba. Todos los ámbitos de existencia social reflejaban etapas primitivas, formas artesanales que carecían de la tecnología y el conocimiento superior de la metrópoli.

Europa, con el descubrimiento de América comienza a definir su identidad por clasificación negativa de toda su exterioridad (resto del mundo). Comienza una clasificación socio-racial del mundo distribuida según gradaciones de color y articuladas con la producción económica cuya base piramidal concentra la identidad negra e indígena y cuya punta se ve representada por el hombre blanco caucásico, lo mismo sucede con la taxonomía cultural del resto de los pueblos del mundo, caracterizados como "culturalmente atrasados" y "económicamente subdesarrollados". 

 Las frases de los "pensadores del centro" son producto de esa atmósfera de superioridad, ellas y las de la Iglesia Católica que describen a los nativos y negros como cuerpos sin alma, mentes sin inteligencia y cabezas sin conciencia conducen la implementación de prácticas de subordinación/dominación enlazadas a construcciones simbólicas que permitieran ejercer sin mala conciencia la violencia ajustada a la producción económica, junto a ello se articula el capitalismo mundial y el proyecto eurocéntrico de la modernidad como el triunfo de la racionalidad europea y de su saber social como hegemonía global.

La complejidad de relaciones materiales/inmateriales que contiene el proceso de articulación y condensación de la identidad europea golpea al resto del orbe e instaura una jerarquía geopolítica caracterizada por la cadena explotación/dominación/conflicto. La explotación en el trabajo cuyo símbolo lo representan las muertes de indígenas y negros en los campos de agro y las minas de plata y oro; la dominación de las elites de poder que organizan el funcionamiento del sistema y el conflicto cotidiano que enfrentan los choques raciales, los problemas de género, generación y la dominación en extenso de la naturaleza por los instrumentos técnológicos de la cultura  moderna.

Europa a inventado y conquistado el mundo entero para fines del siglo XIX, la violencia que la mueve y la atraviesa junto a la extensión de su poder ha logrado invadir cada pequeño territorio y cultura en el mundo. El resultado es la desestabilización completa de los ecosistemas culturales nativos y autóctonos de la periferia de Europa que, incapaces de contrarrestar su poder subordinan su modo de vida social a diseños irracionales de dominación que, paradójicamente recibirán el nombre de "racionalidad" o "proyecto modernizador". Al final de un largo proceso de dominación/subordinación, uno termina hablando el lenguaje del dominador encerrado por el sinsentido.


Textos recomendadoshttp://www.ram-wan.net/restrepo/decolonial/ (se encuentran todos, salvo el de Eric Wolf).

Eric Wolf: Europa y la gente sin historia.
Aníbal Quijano: Colonialidad del poder, eurocentrismo y América Latina.
Arturo Escobar: Mundos y conocimientos de otro modo.
Enrique Dussel: Europa, modernidad y eurocentrismo.
Walter Mignolo: Un paradigma otro.

7 de diciembre de 2011

Pasos...

"El hombre libre en ninguna cosa piensa menos que en la muerte, y su sabiduría no es una meditación de la muerte, sino de la vida".
                             Spinoza, Ética, LXVII, libro IV.





Prefacio.

He sido uno de los alumnos de Gregory Bateson durante tres años y pude ayudarlo a elegir los ensayos que aparecen reunidos aquí, por primera vez, en un volumen. Creo que es éste un libro muy importante, no sólo para los que se ocupan profesionalmente de las ciencias de la conducta, la biología y la filosofía, sino especialmente para aquellos de mi generación —la generación nacida después de Hiroshima— que están buscando una mejor comprensión de sí mismos y de su mundo.

La idea central de este libro es que nosotros creamos el mundo que percibimos, no porque no exista una realidad fuera de nuestras cabezas (la guerra de Indochina es algo malo, nosotros estamos destruyendo nuestro ecosistema y por consiguiente a nosotros mismos, creámoslo o no), sino porque nosotros seleccionamos y remodelamos la realidad que vemos para conformarla a nuestras creencias acerca de la clase de mundo en el que vivimos. El hombre que cree que los recursos del mundo son infinitos, por ejemplo, o que si algo es bueno para uno, cuanto más se tenga de ello, mejor, no será capaz de ver sus errores, porque no buscará indicios de ellos.

Para que una persona cambie sus percepciones básicas, las que determinan sus creencias —lo que Bateson denomina sus premisas epistemológicas— tiene que tomar primero conciencia de que la realidad no es necesariamente lo que él cree que es. Esto no es algo fácil o cómodo de aprender, y probablemente la mayor parte de los hombres que han existido en la historia se las ha arreglado para evitar pensar sobre ello. Y yo no estoy convencido de que la vida no examinada no merezca la pena de vivirse. Pero algunas veces la disonancia entre la realidad y las falsas creencias llega hasta un punto en que resulta imposible evitar la conciencia de que el mundo ha dejado de tener sentido. Sólo entonces le es posible a la mente considerar ideas y percepciones radicalmente diferentes.

Específicamente, es manifiesto que nuestra mente cultural ha llegado a ese punto. Pero en nuestra situación hay tanto peligro como posibilidades. No hay garantía de que las nuevas ideas hayan de ser un mejoramiento respecto de las viejas. Tampoco podemos esperanzarnos de que el cambio sea suave.

 Existen ya bajas psíquicas mortales provocadas por el cambio cultural. Los psicodélicos son un poderoso instrumento educacional. Constituyen el camino más seguro para aprender la arbitrariedad de nuestra percepción ordinaria. Muchos de nosotros hemos tenido que emplearlos para descubrir lo poco que sabíamos. Demasiados de nosotros se han extraviado en el laberinto, han decidido que si la realidad no significa lo que pensábamos que significaba, carece totalmente de sentido. Conozco ese sitio. También yo estuve extraviado allí. Por lo que sé, existen sólo dos maneras de salir de él.

 Una es la conversión religiosa. (Yo ensayé el taoísmo. Otros eligen distintas versiones del hinduismo, budismo y hasta del cristianismo. Y tiempos como éstos siempre producen una muchedumbre de autoproclamados Mesías. Además, algunos pocos de quienes estudian las ideologías radicalizadas lo hacen por razones más religiosas que políticas). Esta solución puede satisfacer a algunos, aunque existe siempre el peligro de satanismo. Pero creo que los que eligen sistemas "prontos para usar" pierden la oportunidad de llevar a cabo un pensamiento verdaderamente creativo, y quizá nada que no sea esto puede salvarnos.

Esta segunda manera de salir —pensar a fondo las cosas y aceptar lo menos posible como artículo de fe— es la más difícil. La actividad intelectual —desde la ciencia hasta la poesía— tiene mala reputación entre los de mi generación. Se echa la culpa a nuestro así llamado sistema educacional, que parece destinado a evitar que sus víctimas aprendan a pensar, a la vez que les dice que pensar es eso que uno hace cuando estudia un libro de texto. Además, para aprender a pensar, uno tiene que tener un maestro que pueda pensar. El bajo nivel de lo que pasa por pensamiento entre la mayoría de la comunidad académica de Estados Unidos sólo puede quizás apreciarse por contraste con un hombre como Gregory Bateson, pero estaría mal hacer que muchas de nuestras mejores mentes desistan de buscar algo mejor.

De todas maneras, la esencia de todos nuestros problemas es un pensar defectuoso, y la única medicina para ello es un pensar de mejor calidad. Este libro es un ejemplo de la mejor calidad de pensamiento que he conocido. Os lo recomiendo, hermanos y hermanas míos de la nueva cultura, con la esperanza de que os será de ayuda en vuestra jornada.

Mark Engel
Honolulú, Hawai
16 de abril de 1971

Nota: Prefacio al libro del biólogo y antropólogo Gregory Bateson, Pasos Hacia Una Ecología de la Mente.

5 de diciembre de 2011

Escepticismo Espiritual

EsceptiCaliente es el fuego y fría el agua,
Fresca es la brisa de la mañana;
¿De quién procedió esta variedad?
Nacieron de su misma naturaleza.
También esto dijo Bharaspati:
No hay cielo ni liberación,
En otro mundo no hay alma alguna,
Y ningún efecto tienen los actos de los sacerdotes,
las órdentes y las cuatro castas.
Si la bestia a los muertos ofrecida
ella misma se conduce al cielo
¿Por qué el padre del sacrificador
no es ofrecido?
Si las ofrendas a los muertos agradan
a aquellos que alcanzaron la tierra de los muertos,
¿Qué necesidad tienen de provisiones
quienes emprenden este viaje?
Si nuestras ofrendas agradan a los seres celestiales,
¿por qué no agradar con ofrendas de comida
a los que viven aquí abajo?
Mientras la vida sigue, deja que el hombre viva feliz,
Aunque esté en deuda, deja que los dulces le alimenten;
¿Acaso podrá regresar cuando su cuerpo
se convierta en cenizas?
Si va a otro mundo aquel que del cuerpo se separa,
¿Cómo es que no regresa, inquieto, por el amor a los suyos?
Es sólo para ganarse la vida
que los sacerdotes fundaron aquí
abundantes ceremonias a los muertos
No hay otros frutos en ninguna parte.
Por benevolencia hacia los demás seres vivos
debemos volar para refugiarnos en la doctrina Carvaka.

Fragmento del Brhaspati Sutra, escrito alrededor del 600 a.C

26 de noviembre de 2011

Brujería en el sur.

"En un devenir animal, siempre se está ante una manada, una banda, una población, un poblamiento, en resumen una multiplicidad... es la efectuación de una potencia que desencadena y hace vacilar el yo... Nosotros los brujos lo sabemos desde siempre.".                                  
   Recuerdos de un brujo I.

Chilwe es palabra mapuzungún que significa "lugar de chelles", éstas son unas aves que pueblan toda la actual Chiloé. Precisamente las aves juegan un rol significativo en el imaginario mágico del sur de Chile. La geografía del significado se ve atravesada por aves que anuncian desde la muerte, la suerte, la salud o el encubrimiento de un ser que, accediendo a fórmulas ocultas puede manipular objetos o convocar las fuerzas de los espíritus animales.

 Rastrear las funciones del simbolismo peligroso que encarnan los ritos y hechizos mágicos de la brujería como expresión soterrada de la humanidad a sido el trabajo de varios etnógrafos(as), destacando descripciones que han transferido experiencias de vida e imaginación social creadora de costumbres y miedos que vehiculizan conductas y capturan al pensamiento en torno a un símbolo, génesis de procesos históricos de lucha, resistencia y clandestinidad, aunque también de prácticas transmitidas bajo el régimen del secreto.

La brujería como un modo social de relacionarse no únicamente entre personas, sino también con objetos portadores de vida social y con animales y vegetales que combinan significados en la difícil tarea por conquistar porciones de realidad. En Chiloé, como también en regiones europeas dichas prácticas pusieron en jaque la hegemonía de la dominación de la Iglesia y las formaciones monárquicas -dos de las más grandes instituciones de dominación social- generando como respuesta la instauración de los tribunales inquisidores que arrasaron con los modos heréticos alejados del significado central, que construyó la Iglesia romana luego de varias disputas y concilios que buscaban sentar las bases y los fundamentos de su dogmática.

La instauración de regímenes de verdad y de instituciones sociales defensoras de ese régimen  no admiten la diferencia, y si la admiten no es sino en los marcos donde esa diferencia no escapa a la organización jerárquica del orden simbólico (como las actuales oficinas estatales encargadas de construir/financiar los proyectos de identidades regionales o locales o, en otro plano, la combinación de símbolos cristianos con símbolos indígenas), están por un pensamiento único y universalista, han estado siempre trabajando para erradicar cualquier posible relativización o desestabilización de significados o prácticas que abran posibilidades disfuncionales al orden imperante.

Un ejemplo en este documento del proceso que llevó a cabo el gobernador de provincia Martiniano Rodríguez en 1880 a la sociedad de brujos de Chiloé conocida como "La Mayoría" o "La Recta Provincia" en el juzgado de Ancud, tendientes a erradicar la existencia de "una sociedad criminal que ha producido la miseria y muerte de familias enteras...", pero cuya verdadera misión consistía en desarticular una organización entre cuyas misiones estaba la administración de la justicia del territorio chilote, toda una amenaza para el estado chileno, la administración del espíritu que regenta la Iglesia Católica y para la disciplina de los sistemas de creencia.

http://www.memoriachilena.cl/archivos2/pdfs/MC0008651.pdf

16 de noviembre de 2011

Periodista en acción.

"Cuando la hipocresía comienza a ser de muy mala calidad es hora de comenzar a decir la verdad" Bertolt Brecht. 

Ya que no todo puede ser antropología, aquí un periodista hablando con amor y ternura a sus representastes políticos. Igualito que acá

7 de noviembre de 2011

Sentido y micropolítica.

Una letra se acopla a un ritmo de variaciones que ejecutan una sintonía entre el conjunto que ellas conjugan (una música) y la persona que la escucha, la siente y las hace suyas, algo anda bien, el gusto lo aprueba y el sentido emerge.

La situación anterior describe partículas de sentido que inundan un espacio y son incorporadas por un cuerpo como componiendose junto a él. Pero lo anterior no nos describe la situación donde las personas se mueven en el mundo en función de encuentros que le permitan sostener que la vida -al fin y al cabo- tiene un sentido, hablando ampliamente.

Sentido es incorporación de partículas seleccionadas (no encuentro mejor palabra) que sólo en la medida que conforman una composición mayor, lo que se podría denominar un modo de vida, logran consolidar elementos heterogéneos que funcionan (hacen uno) dentro de un cuerpo.  Bajo esa mirada una persona no refleja el mundo (como totalidad), sino que estructura un mundo o para ser más precisos el mundo emerge con él y con ello se entienden las definiciones de la filosofía vitalista que enuncia que bajo ningún punto de vista somos seres, sino que somos maneras de ser posibles.

Las feministas saben bastante de esto, quizá no de la manera como lo expongo, sin embargo, hay tesis de estas agrupaciones en donde justo cuando las ciencias sociales hacían un viraje-esfuerzo por determinar una temática que estudiara los elementos estructurales, institucionales y funcionales sobre las sociedades y sus productos de regulación (macropolítica), dejaban de lado los elementos micropolíticos que actuaban simultáneamente dentro del tejido social. Ambas (macro y micro)  son dimensiones de un mismo movimiento que sólo encuentran "contradicciones" en las construcciones teóricas que obstinadamente las describen como antagónicas o no pertinentes para el estudio de una disciplina.

En unos post anteriores describimos al sentido como una producción, es decir, como algo que nuestro cuerpo-conciencia selecciona, combina, elabora y construye, es algo que sólo puede ser producido por uno mismo dentro de un contexto que nos determina como culturalmente mediados y contextualmente situados. Lo anterior nos permite entender la violencia sobre la cual toda formación de sentido tiene que transitar para poder elaborar un mundo propio que no esté condicionado material ni simbólicamente por restricciones que paralicen toda posible transformación (las morales, los rituales sociales, las creencias, las prácticas normalizadoras y en algunos casos las identidades).

Conciencia y sociedad se emsamblan únicamente cuando no estan atravesadas por el conflicto. La resistencia a los modelos de sociedad imperantes sólo son inteligibles para los subordinados, es decir, para los sujetos que padecen los efectos del poder, ya que el poder es invisible en su operar para aquél que posee los privilegios del poder; tómese como ejemplo las personas de piel blanca sobre las negras, los hombres sobre las mujeres, las clases dominantes sobre las dominadas, etc., en esas situaciones  los que ostentan los privilegios jamás se cuestionan su condición de privilegiados, ni sufren las consecuencias sociales bajo la forma del conflicto.  Lo anterior son resultados de un proceso vivido donde se manifiesta por un lado una historia (biografía) frente a las estructuras en las cuales se desenvuelve dicha experiencia, que al estar construidas jerárquica, disimetral y segregacionalmente, sólo pueden dar como productos cuerpos que habitan sociedades sin un contenido que les proporcione sentido ni vínculo positivo, es vida en resistencia.

El sentido tiene que ver con la capacidad de acceder al inconcsiente, que es el lugar donde el cuerpo ejecuta mayormente sus movimientos e intercambios sociales, es ahí donde se encuentran enquistadas recurrencias neuronales que al no tener un acceso pleno por parte de la conciencia impiden los procesos de autoobservación y de cambio que traería consigo acceder a dichas funciones. La idea de inconsciente no tiene mucho desarrollo dentro de las ciencias sociales en la actualidad y existen algunos autores (como Luhmann) que derechamente abandonan su uso por ser un concepto con nula capacidad explicativa.

Sentido tiene que ver además con las proyecciones de la persona dentro del mundo que habita, la capacidad que tiene ésta de situarse en un futuro posible y el sentido que lo informa. Pero hay que preguntarse porque el sentido tiene tan alta capacidad de fallar en la elaboración que afirma en cada nueva situación, la falla permanente forma parte de la experimentación que tarde o temprano permitirá ofrecer sentido/sin sentido como producto, y la experimentación es el concepto que permite ver a cada uno de los cuerpos como soberanos políticos de sus decisiones para vivir. Sobra decir que al igual que el sentido, la noción de cuerpo como posibilidad de soberanía son casos políticamente extraños, por lo general la educación desde la niñez se enmarca bajo situaciones de obediencia y dependencia en un contexto de subordinación permanente sin espacio para una ética de la transformación.

Ver la vida como política, es afirmar que hasta las creencias más profundas y extendidas dentro de la cultura que vive cada cual sólo son construcciones que se manifiestan como no construidas, productos de los cuales se han olvidado que lo son, símbolos que escapan al tiempo de la historia como articulador de posibles, historias que se manifiestan pesadamente como un fin, un lugar para detenerse y estabilizarse (hay que ver y leer como en grandes relatos míticos la estabilidad y el descanso eran metáforas de la muerte, también en filosofía política-vitalista Nietzsche lanza la acusación contra el budismo como forma de vida que abandona las fuerzas mismas de la vida, pulsión de muerte). Pero la vida y los procesos de construcción nuevos sólo responden a una violencia que les viene de afuera (sociopolítica), capaces de buscar sin descanso los elementos que podrán utópicamente responder que otra lógica y otro mundo son posibles, macro y micropolíticamente hablando y sobre todo trabajando.

31 de octubre de 2011

De la libertad.

"Tenemos necesidad de las mentiras para conquistar esta realidad"                                              Friedrich Nietzsche

"Los peces son los últimos es descubrir el océano"
                                                                  Proverbio chino

Habríamos querido encarar la construcción de todo concepto sospechoso mediante una analítica que diera cuenta de como a un concepto se le carga de sentido aplicándole una significación arbitraria, proceso complejo que toda sociedad construye mediante condensaciones simbólicas decantadas por el operar político. En realidad los conceptos como libertad, igualdad o fraternidad, sólo son símbolos imposibles, pero que de muchas maneras llenan de sentido nuestras vidas.

Hay investigaciones referente a este asunto, pero cabria preguntarse, para contextualizar el asunto y sacudirlo de su mera abstracción, el caso particular que actualmente desgarra a Libia entre dos grandes facciones con un ya -a estas alturas- claro ganador. No hace falta encarar el problema desde las percepciones arbitrarias que han construidos los medios de comunicación masivos (en todo occidente). Los reflejos de semejante espejo se pueden reducir en una serie de temas: 1.- Gadafi era un dictador, 2.-Un vanidoso y obsceno admirador de falsos lujos y excentricidades varias (un lugar común del periodismo), 3.- Un falso representante de las causas justas enarboladas por la izquierda populista, 4.- Un enamorado del poder y -por tanto- antidemócrata, 5.- Un ladrón de marca mayor, proceso que en lenguaje periodístico recibe el maquillado nombre de "enriquecimiento ilícito", en resumen un chico malo.

Podriamos seguir, pero detengámonos ahí, por que acá la cuestión no es saber las falsas virtudes ni defectos de un gobernante tan lejano como desconocido para esta parte del mundo. Es sabido que en occidente la escasez de información es completada por los prejuicios disponibles que tiene almacenado toda formación sociocultural para sujetar (o cumplir la función ideológica elemental que fundamenta toda creencia) bien la realidad. 

Si uno se atreve a hacerse un par de preguntas podrá llegar facilmente al asunto en cuestión... ¿Porqué acá si y allá no?, ¿por qué todas las intituciones militares de alianza europea-norteamericana funcionan amenazantemente como rectores de la democracia, observadores transparentes de la realidad y portavoces de la verdad en el caso Libia y en Siria se mantienen como meros observadores?

El discurso/semántica que tanto EE.UU/Europa han logrado instalar mundialmente como geopolítica que regula y dirige la multiplicidad de las relaciones políticas entre el conjunto de estados-nación a nivel planetario no admite cuestionamientos foráneos (relaciones centro-periferia), apenas si acepta los internos y constituye el eje de matriz que permite a las distintas instituciones de regulación política mundial, establecer los presupuestos de una convivencia entre los habitantes de dicho campo.

La libertad como construcción estratégica de un concepto político será tan efectivo como personas integrantes del flujo social sobre el cual transita sean capaces de hacerlo suyo, vivirlo y defenderlo. Pero la libertad es -como dijimos más arriba- un concepto (una idea lógicamente articulada), un percepto (idea que encarna formas de dirigir la percepción) y un afecto (una idea que enseña a percibir el mundo y engancharla emocionalmente). La libertad es comprendida como un concepto que encara una forma de vivir el mundo, donde se proclama el libre emprendimiento, la libertad de elegir a quienes nos representan, la libre disposición a expresar nuestras formas de pensar, la libertad de elegir el producto que mejor nos parezca.

Y sin embargo, no es una libertad para no elegir, para determinar los fundamentos mismos en base a los cuales la vida obedece a las estructuras sociales en las cuales se encuentra sumergida. Como pez en el agua la libertad funciona como un concepto que le da sentido a un determinado tipo de vida, pero del cual no nos damos cuenta en su operar ideológico, así como el pez no aprehende el oceáno como contexto de su existencia.

La libertad junto a conceptos como el de progreso, desarrollo y el de técnica encarnan artículos complejos de una articulación, líneas de significación que en su conjunto dibujan un mapa del poder, una hegemonía para subordinar, y su forma más efectiva de constitución, una colonización occidental del significado llenándo de sentido a la vida, no importa si su contenido es parcial y arbitrario, siempre se tendra un grupo de vidas que aprendan a hacerlas suyas en la experiencia, por que la realidad requiere de significación al instante para poder ser vivida en los cuerpos, es la forma como las instituciones se encarnan en los cuerpos porque los cuerpos mismos son atravesados por las instituciones.

11 de octubre de 2011

La Selva.

"Cuando los grupos logran alguna identidad buscan objetos o criaturas para convertirlas en símbolos"

Son las mujeres las que danzan en torno al arbol de la leche e inician a la novicia yacente haciendo de ella el centro del círculo que gira. El árbol de la leche no es solo la «bandera de los ndembu en las primeras fases del nkang'a es mas especificamente la bandera de las mujeres ndembu. En esa situación hace más que dotar de un centro a la exclusividad de las mujeres: las moviliza en oposición a los hombres, pues las mujeres entonan cantos en los que se mofan de los hombres y durante cierto tiempo no les dejan que dancen en su mismo círculo. Por tanto si hemos de tomar en cuenta el aspecto operacional de ese símbolo que es el árbol de la leche, considerando no sólo lo que los ndembu dicen sobre él, sino lo que también hacen con él en su sentido, tendremos que conceder que distingue a las mujeres como categoría social e indica su solidaridad. (V. Turner).

30 de septiembre de 2011

Cambiar la percepción.

"Rompiendo el Tabú" es un documental brasileño que muestra la necesidad de iniciar un proceso serio de descriminalización de la droga, mediante un cambio en las nociones históricas que han construido a la droga como fuente única de enfermedad, descontrol y delincuencia. Una crítica a la criminalización comunicativa de las drogas articuladas por las agencias de poder estatal y su fracaso.

Ver --> http://terratv.terra.cl/entretenimiento/cine-y-tv/peliculas/4611-333416/rompiendo-el-tabu.htm

11 de septiembre de 2011

fiestas patrias.

 Así pues, con un espíritu antropológico propongo la definición siguiente de la nación: una comunidad política imaginada como inherentemente limitada y soberana.


 Es imaginada porque aun los miembros de la nación   más pequeña no conocerán jamás a la mayoría de sus compatriotas, no los verán ni oirán siquiera hablar de ellos, pero en la mente de cada uno vive la imagen de su comunión. Renan se refirió a esta imagen, en su estilo afablemente ambiguo, cuando escribió: “Or l'essence d'une nation est que tous les individus aient beaucoup de choses en commun, et aussi que tous aient oublié bien des choses.” Con cierta ferocidad, Gellner hace una observación semejante cuando sostiene que el “nacionalismo no es el despertar de las naciones a la autoconciencia: inventa naciones donde no existen”. Sin embargo, lo malo de esta formulación es que Gellner está tan ansioso por demostrar que el nacionalismo se disfraza con falsas pretensiones que equipara la “invención” a la “fabricación” y la “falsedad”, antes que a la “imaginación” y la “creación”. En esta forma, da a entender que existen comunidades “verdaderas” que pueden yuxtaponerse con ventaja a las naciones. De hecho, todas las comunidades mayores que las aldeas primordiales de contacto directo (y quizá incluso éstas) son imaginadas. Las comunidades no deben distinguirse por su falsedad o legitimidad, sino por el estilo con el que son imaginadas. Los aldeanos javaneses han sabido siempre que están conectados con personas que jamás han visto, pero esos lazos fueron imaginados alguna vez de manera particularísima, como redes infinitamente extensas de parentesco y clientela. Hasta hace muy poco tiempo, el idioma javanés no tenía ninguna palabra que significara la abstracción “sociedad”. Ahora podemos pensar en la aristocracia francesa del ancien régime como una clase; pero es seguro que sólo mucho tiempo después fue imaginada como tal. La respuesta normal a esta pregunta: “Quién es el conde de X?” no habría sido “un miembro de la aristocracia”, sino “el señor de X”, “el tío del barón de Y”, o “un cliente del duque de Z”.    
 
 Limitada porque incluso la mayor de ellas, que alberga tal vez a mil millones de seres humanos vivos, tiene fronteras finitas, aunque elásticas, más allá de las cuales se encuentran otras naciones. Ninguna nación se imagina con las dimensiones de la humanidad. Los nacionalistas más mesiánicos no sueñan con que habrá un día en que todos los miembros de la humanidad se unirán a su nación, como en ciertas épocas pudieron pensar los cristianos, por ejemplo, en un planeta enteramente cristiano.
La nación se imagina


Se imagina soberana porque el concepto nació en una época en que la Ilustración y la Revolución estaban destruyendo la legitimidad del reino dinástico jerárquico, divinamente ordenado. Habiendo llegado a la madurez en una etapa de la historia humana en la que incluso los más devotos fieles de cualquier religión universal afrontaban sin poder evitarlo el pluralismo vivo de tales religiones y el alomorfismo entre las pretensiones ontológicas de cada fe y la extensión territorial, las naciones sueñan con ser libres y con serlo directamente en el reinado de Dios. La garantía y el emblema de esta libertad es el Estado soberano.

Por último, se imagina como comunidad porque, independientemente de la desigualdad y la explotación que en efecto puedan prevalecer en cada caso, la nación se concibe siempre como un compañerismo profundo, horizontal. En última instancia, es esta fraternidad la que ha permitido, durante los últimos dos siglos, que tantos millones de personas maten y, sobre todo, estén dispuestas a morir por imaginaciones tan limitadas.

Texto: Benedict Anderson, comunidades imaginadas, introducción (fragmento).                                             

6 de septiembre de 2011

No se puede vivir del amor.

"El amor ha sido siempre el medio por el cual la libido alcanza otra cosa que la persona amada, a saber: todo un corte del campo social-histórico".     G.D.



Iniciar el PC, encender la TV, salir a la calle, son tres formas de acceder al flujo de la comunicación y sus significados sobre el conjunto de la experiencia. La densidad de información es tal que la antropología echa mano al concepto de símbolo para hacer visible lo invisible, los significados públicamente en circulación que afectan a los cuerpos y que tienen la capacidad de reunir microsignificados dispersos y condensar su sentido mediante una generalización, los símbolos como estructuras de significación son los que tarde o temprano le dan una trayectoria a la experiencia y permiten entender a la cultura como un sistema.


Lo importante de seguir aquí es que “la política es uno de los principales escenarios en que se desenvuelven públicamente estas estructuras” (Geertz, 1997: 264). La política no como lo político institucionalizado (partidos + congreso + ejecutivo), sino como lo que demanda una acción inmediata de lucha frente a lo estructurado. Los movimientos son actores sociales que perturban las instituciones precisamente porque no respetan las reglas y los códigos que regulan lo institucionalizado y sus rituales de reproducción, que son siempre medios de integración social a la vez que instrumentos a través de los cuales se perpetúan los intereses dominantes (Melucci, 1995: 5).

Generan prácticas nuevas que no reconocen la tradicional competencia política y que abandonan la racionalización guiada por la dirigencia, para poner en juego nuevas formas de participación y de burocratización.

La sociedad la leemos acá como un campo de lucha sistemática en torno a los significados que al ser públicos y transmitidos mediante comunicación reiterada, son capaces de regular la conducta y práctica de todos los participantes del proceso de comunicación, lamentablemente a un costo demasiado alto en el cual una gran mayoría se ve obligada a abandonar búsquedas individuales debido a que todo ha sido previamente dado e institucionalizado en formas reconocidas. La transgresión tiene un alto costo comunicativo y por lo general nunca escapan al sentido común, que dispone de códigos negativos que frenan la producción de dichas prácticas e impiden su proliferación masiva.

Todo lo anterior para decir que la vida en sociedad demanda una acción de resistencia y producción que sea capaz de generar una respuesta al flujo del sistema social bajo su modalidad que ordena dominando (un efecto de dominación del campo político hace creer que lo político es lo institucionalizado como político). El poder decía un viejo autor es incapaz de operar sin afectar a los cuerpos de tristeza, ya que es bajo esa modalidad afectiva en donde tienen su lugar la resignación, el desinterés político (individualismo liberal, culto narcisista), el gusto por las supersticiones o el apego a la moral, es el gusto por el...

31 de julio de 2011

Subversión/experimentación.

No le crea a nadie; Salga a caminar. (Graffiti).

"A fuerza de eliminar (...) entonces uno es como la hierba: ha creado una multitud, ha hecho de todo el mundo un devenir, puesto que ha creado un mundo necesariamente comunicante, puesto que ha suprimido de sí mismo todo lo que le impedía circular entre las cosas y crecer en medio de ellas" (Mil Mesetas).

Una de las razones de la ola de descontento social es precisamente la consolidación de una estructura social encargada de administrar descontentos a través de grandes cuerpos duales que cierran la participación (y por tanto la modificación misma de los estatutos del sistema) a otros actores.

Un grupo organizado en el poder no es cualquier cosa. Para empezar, la disputa permanente por los significados sociales que organizan lo social se ven instituidos en un sistema político a través de leyes que tienen por función naturalizar el significado y transformarlo así en eje de prácticas e interpretaciones sociales que regularizan las relaciones intersubjetivas mediante sedimentaciónes simbólicas, es decir, reducen la posibilidad de hacer vida a modelos y lineamientos empobrecidos, precarización de la vida, biopolítica.

El punto anterior es para extenderse dias enteros, pero en este blog preferimos dar la lata de manera resumida, así que voy al siguiente punto.

¿Cuál o cuáles debiesen ser la respuesta  ante dicho plan estructural? Aquí la subversión juega un papel estelar, ésta sólo es completada efectivamente mediante la experimentación que le acompaña. Es muy difícil encontrar a personas que estén experimentando consigo mismas, ya sea de manera individual o comunitaria, por lo general la estructuración de la vida, culturalmente mediada, reduce el devenir de la misma a una serie vasta y compleja de rutinizaciones (siempre las mismas palabras, los mismos gestos, las mismas interpretaciones... todo conduce al hastío). La subversión + experimentación es a vez la destrucción y realización de nuevos deslizamientos que permiten al cuerpo fugarse de la matriz normativa de normas que limitan al deseo a una trayectoria predeterminada (el género), la inteligencia a un reducido repertorio de ideas (la ideología),  la imaginación  a un conjunto de imágenes y modelos por anhelar y el afecto y su potencia ante la efectividad del símbolo. El resultado es la alienación del ser humano, el condicionamiento del sujeto  a un conjunto de patrones socioculturales, la incuestionabilidad de la cultura y el dominio de la tristeza (entendida al ritmo de Spinoza).

Si se tienen esos aspectos (y muchos más) en mente se comprenden las palabras de Nietzsche sobre las posibilidades y las virtudes del olvido ("dejar atrás es perfecto") y es que precisamente las ciencias cognitivas describen al olvido como una liberación de energía que permite reintroducir nuevas dinámicas al sistema que lo rearticulan. En ese mismo sentido se explicitaba Foucault en la práctica de la ascesis, no como un apartarse del mundo, sino como un continuo y constante trabajo sobre uno/a mismo.

El trabajo de eliminación es el principio de una verdadera experimentación y subversión corporal (o social) que ponen en juego las condiciones de la vida y la entrada en zonas donde la selección no se reduce únicamente a reproducciones  del mundo social imperante, sino a búsquedas que otorgen algún sentido, y es que, tal como decía Deleuze y Luhmann el sentido no es algo que uno encuentre con el kioskero, al sentido hay que producirlo... y ¿qué saben de eso los políticos y partidarios del sistema?



24 de julio de 2011

Los Chacarilla Boys (o de la amnesia Chilena).

                                                                                 

                                                                                    Por: José Bengoa.
  No hay peor enfermedad social que la falta de     memoria histórica. Chile la sufre de modo agudo. El 9 de julio de 1977 un grupo de 77 jóvenes nacionalistas de extrema derecha subió al cerro Chacarillas, al lado del San Cristóbal, en el acto más fascista de todos los tiempos de este país. Emulaban a los 77 soldados de La Concepción en la guerra con el Perú. Bosques de banderas y antorchas al más puro estilo del nazismo hitleriano iluminaban la noche de invierno. Pinochet en un momento de inspiración arrebatadora leyó su famoso discurso. “Mi corazón de viejo soldado -decía- revive con profunda emoción el coraje insuperable de Luis Cruz Martínez… y los 76 …., que en plena soledad de la sierra peruana supieron demostrar, con la entrega de sus vidas, que nuestra Patria y los valores permanentes del espíritu están por encima de cualquier sacrificio personal que su defensa pueda demandar”. Delirio en el cerro de Santiago.

En esos mismos días eran torturados en el “Palacio de la Risa”, así llamada la Villa Grimaldi, miles de chilenas y chilenos. Se las violaba, aterrorizaba, y luego se las iba a tirar al mar, como a Marta Ugarte, una de las primeras que en esos mismos días apareció flotando en las playas de Longotoma. Mientras los jóvenes subían en medio de antorchas, los gritos de horror se escuchaban en los subterráneos del poder entusiasmado. “…Las limitaciones excepcionales que transitoriamente hemos debido imponer a ciertos derechos, han contado con el respaldo del pueblo y de la juventud de la Patria, que han visto en ella el complemento duro pero necesario para asegurar nuestra Liberación Nacional”, dijo el General en medio de los aplausos de los jóvenes patriotas en medio de la noche de Chacarillas.

“El complemento duro pero necesario” da escalofríos y ganas de vomitar. Todos y todas quienes allí estaban sabían muy bien a qué se refería el General. Era explícito.

¿Quiénes subieron a Chacarillas? Ayer fue el cambio de gabinete. El listado de El Mercurio de la época señala el número 15 de los valientes: Andrés Chadwick, hoy Ministro Vocero de Gobierno; número 38, Cristián Larroulet, Ministro del triunvirato de La Moneda; y 39, Joaquín Lavín, defenestrado Ministro de Educación y resucitado Ministro de Planificación Nacional. La lista es larga y sería un ejercicio de “buena memoria” publicarla con letras de molde. El número 47 es el actual Presidente de la Cámara de Diputados, y el número 20 es el dueño de la Universidad San Sebastián, emblemático modelo de lo que debe ser la educación universitaria “con fines de lucro”. El número 17 se reía ayer a mandíbula batiente en La Moneda al ver cómo sus “Chacarillas Boys” se tomaban finalmente La Moneda, en el asalto al Poder, que esa noche lluviosa del invierno del 77, los 77 cabalísticamente (como es propio de los fascismos corrientes) habían prometido solemnemente. Juan Antonio Coloma, se llama.

Ninguno de estos “Chacarilla Boys” ha hecho autocrítica alguna ni pedido perdón, han pasado “colados” en medio de las tormentas. “No sabían” es lo que más mentirosamente han tratado de balbucear. ¿Qué no sabían? Todos los que vivíamos en Chile lo sabíamos detalladamente. ¿Usted, Presidente Piñera, no sabía y no sabe a quiénes está metiendo en La Moneda?

¿Nadie se acuerda cómo sacaban a miles de personas en las madrugadas de ese año 77 a alguna cancha de fútbol a las seis de la mañana, congelada, y les pegaban, los fichaban, los denigraban y dejaban como estropajos? ¿Nadie se da cuenta que aplastaron un siglo de luchas obreras con el terror? ¿Nadie se acuerda que el próximo Ministro del Bienestar Social escribió el panfleto más deleznable de nuestra historia literaria, “La Revolución Silenciosa”? ¿Por qué no lo vuelven a publicar?

Pero lo peor es la confusión ideológica del momento… de los que alguna vez estuvieron en el lado de los antiguos perdedores. Hay quienes han dicho y siguen diciendo que ya la derecha no es la misma. Que Piñera es una nueva derecha. Se les fundió la memoria. Hay otros, de la otra banda, que acaban de decir que en Chile hay “dos derechas”. Con respeto personal, pero andan más perdidos que el Teniente Bello. Muy triste. Hay que decirlo, los antiguos perseguidos también lo confunden todo. Sin embargo, los errores, desvaríos, soberbias, silencios, complicidades, de un Ricardo Lagos o una Michelle Bachelet, no tienen ni un punto de comparación con lo que se vivió en esos días y que fue aplaudido por las actuales autoridades del país.

Escucho desde mi mente deprimida los lejanos aplausos en Punta Peuco. En Bucalemu un difunto se da vueltas de alegría en su tumba. Los fantasmas están presentes, más que nunca. Gozan de buena salud. Se ríen con su sonrisa regordeta y a todo color digital de la historia trágica de nuestro país.

Y no me critiquen a los cabros que agarran piedras y destrozan el “mobiliario urbano” del alcalde de Santiago. Cuando no hay espacio para la memoria y las razones, sólo hay piedras. Quizá ahí está la memoria de los hijos de quienes sacaron a la mala en las noches heladas del 77, mientras otros subían en medio de antorchas y cánticos patriotas a Chacarillas.

Vergüenza me da. Vergüenza de ser chileno.

7 de julio de 2011

Libro: Producir para vivir, los caminos de la producción no capitalista.

Libro que reúne los trabajos de diversos sociólogos y antropólogos del hemisferio Sur. Destacan los aportes de varios trabajos brasileños e indios. Coordinado por Boaventura de Sousa Santos (Doctor en sociología, Yale), se examinan en detalle prácticas sociales de producción comunitarias basadas en experiencias reales de participación y cooperación social de trabajadores para la producción de bienes y artefactos alternativos al régimen de producción capitalista. Especial énfasis puesto en las cooperativas exitosas (como Mondragón) del primer y tercer mundo y de sus consecuencias inmediatas en los aspectos sociopolíticos olvidados por el capitalismo contemporáneo como son: la solidaridad, la alta participación democrática de los trabajadores en las decisiones de la empresa, relaciones sociales horizontales, distribución homogénea de los beneficios económicos, etc.
Este libro llena un vacío enorme que se refleja en la abundante bibliografía crítica sobre los patrones y mecanismos sociales dominantes y la (más escasa) activación de prácticas y pensamientos de resistencia colectivos como modos de existencia.

7 de junio de 2011

La circularidad del mundo, el juicio.



Las utopías son luchas que ocurren en el presente por el significado del futuro
Paul Ricoeur.

Creo que no existe ninguna enseñanza más difundida (independiente de la cultura y la clase social en la cual uno se clasifique o sea clasificado) en el mundo entero, hoy y ayer que el hábito social de juzgar a los existentes. No paramos de juzgar gestos, signos, formas, líneas, tonos, escritos... El rostro y su extensión son infinitas formas de sostener la existencia y su más contemporánea enfermedad, la interpretación, a través de la cual la tradición se impone como tal.

Vivimos inmersos, sumergidos segundo a segundo en un mundo de signos que inundan el espacio. La consecuencia inevitable de vivir es encontrarse con signos (un libro, una calle, una mujer, una canción...) que tienen un efecto inmediato en el alma. El alma (y perdónenme que use esta palabra) sólo sostiene las cosas y cuerpos que entran a su encuentro mediante las ideas que es capaz de formarse de los mismos, pero socioantropológicamente se sabe que dichas ideas son producto de la interacción social, dicho proceso de socialización inconciente provee de juicios que son interiorizados sin mayor filtro por el cuerpo para que éste pueda operar lo más económicamente posible en el mundo. Así se entiende al conjunto de ideas enunciadas por conceptos como "dispositivos de conocimiento", "tecnologías de la cultura" o la vieja y señera noción de "aculturación".

Los procesos cognitivos de apropiación (internalización) de discursos sociales (comunicaciones) que dan forma a la idea general de cultura, (como sistema de símbolos) no nos dejan muy claro hasta que punto la cultura misma, como sistema de coordenadas interceptadas por los sujetos a través del sentido, no es al mismo tiempo que la fuente de la estabilidad (el arraigo, la identidad), la fuente de las más feroces crisis de conciencia y sentido entre un cuerpo, que ha caido en la trangresión de la norma (un homosexual, lesbiana, drogadicto, minusválido, etc.) y su incapacidad para encontrar recursos -más allá de los sociales- que le permitan enfrentar el quiebre que significa el ideal social a representar y el papel representado.

Sabiendo que por el juicio sólo alcanzamos direcciones prefabricadas que desmenuzan al mundo inmediato, asignando identidades que fijan los elementos, distribuyendo secuencias previamente distribuidas por el ethos de clase/cultura, realimentamos una vieja y prejuiciosa norma de toda sociedad, la cual predica que lo bueno encuentra su lugar en la tradición. Es a través del juicio (poblado de sus valores pre-existentes) que nos impedimos de ver lo original de un cuerpo u obra y hasta de poder presentir la creación de un nuevo modo de existencia, tan necesario en este tiempo. El juicio frena la experiencia y la llegada de nuevas formas mediante reactualizaciones de lo mismo.
Habrá que desprenderse de la idea reaccionaria enunciada por diversos agentes, según la cual, la utopía ya no existe.

4 de junio de 2011

videorama.


1.- The Secret Powers Of Time        
         Philip Zimbardo

2.- The Crisis of Capitalism.           
        David Harvey

3.- The Empathic Civilization.       
        Jeremy Rifkin

4.- Changing Paradigms.                      
        Ken Robinson


Nota: Estas son extracciones breves de conferencias dictadas en la RSA, para mayor profundización se puede recurrir a las charlas completas, en algunos casos (como la "Civilización Empática") se encuentran las conferencias totales traducidas al español.

24 de mayo de 2011

Callejear.

Dice un papel escrito con tinta verde,
que teniendo paciencia todo se alcanza
                                                 Violeta P.


Uno siente que de tanto en tanto aflora un período de trastornos y revueltas que purgan por revolucionar las estructuras simbólicas que administran rígidamente a toda formación social. Desde la historia han sido descritas como las épocas primaverales de la secuencia espacio/temporal humana. Dichas secuencias (son destellos) se caracterizan por una movilización de las comunicaciones en la calle misma. Porque a pesar de que los diarios y analistas políticos no se cansan de repetir que las redes de comunicación social (Twitter y Facebook) han propiciado una coordinación sorpresiva y efectiva de un alto número de personas en la participación de las movilizaciones, no hay que olvidar que, en última instancia, éstas se materializan en la práctica de manera voluminosa en la toma e intervención de las calles y avenidas simbólicamente asociadas al centro del poder político del estado-nación.

Si estos movimientos consisten en la invocación de 'desafíos simbólicos' (exigencias de cambio) que resquebrajan la continuidad (el orden) del espacio de poder sociopolítico del Estado, y si, como bien se sabe estas prácticas sucitan una tensión y resistencia de los aparatos del estado a los procesos de movilización de actores, tendremos que preguntarnos cuánto tiempo más las políticas del desarrollo económico occidental (y las prácticas/simbolos enlazadas a ella) definidas como Capitalismo  pondrán soportar las demandas de dignidad e igualdad que por años el discurso dogmatico de la versión neoliberal actual logró anestesiar (directa e indirectamente) con ideas absurdas (como la noción de término de la historia) o el llamado al cuco simbólico más universal del relato económico del norte: ese que dice que si no seguimos los mandamientos bíblicos del progreso, ponemos en jaque la existencia misma de la sociedad en su camino al bienestar.

Habrá que tensionar el arco al máximo para desbaratar y desestabilizar las partículas de sentido que en su conjunto sostienen una inmensa red estructural de comunicaciones que organizan al espacio social como un lugar para dominar. Al contrario  las organizaciones políticas e instituciones de poder buscan encauzar todo descontento social a través de un saber técnico (universidades incluidas) que les otorgue sentido, una forma y un límite determinado a una cosa que de entrada los descoloca, sin esas tecnologías, sin esos mecanimos de codificación a través de los cuales realizan un marcaje, no tan sólo de los fenómenos sociales, sino también de las personas mismas, las relaciones de fuerza estarían altamente mediadas por el conflicto, a través de ellas se prepara y construye una maquinaria social que permite administrar dichas clasificaciones y reordenar signos dispersos en función de nuevos códigos dispuestos para la manipulación sociopolítica.

Un movimiento social se juega toda su potencia en la voluntad e intensidad que es capaz de movilizar, porque a pesar de que el tiempo juegue en su contra y las instituciones sociales se esfuercen en delimitar, el sólo hecho de constituirse como movimiento hace posible la visibilidad de un(os) problema y de agentes dispuestos a transitar sobre el drama de toda formación social, lo desconocido en movimiento.

24 de febrero de 2011

Zeitgeist III: Moving Forward +++ (imagínese 3 estrellas).

Hace ya un mes se dió el lanzamiento mundial de la última Zeitgeist III: Moving Forward simultáneo en más de 60 países, como todas las cosas tiene sus lados buenos así como sus lados parejitos (entre ellas durar casi 3 horas, es demasiado). El documental esta compuesto de 5 partes: El sistema, la condición, la cultura, la falla y la transición. Un poquito engrupido el tal Joseph, pero vale la pena verlo (aunque sea uno o dos capítulos, el resto no sé...).

Una recomendación, si apreta click, sáltese los primeros 9 minutos. La traducción la encuentra en la aplicación CC.

Lo dejo acá y le pido humildemente al administrador del sitio que cree una carpeta (o algo así para ir juntando los documentales).

Nota: Si usted quiere estudiar antropología piénselo dos veces, hay otras formas de hacerse millonario.


26 de enero de 2011

La administración del consumo.


Breve documental franco-español sobre la manipulación técnica para reducir la duración de los productos.
Duración: 52 minutos aprox.

23 de enero de 2011

Cuerpos Transexuales.

“Si usted quiere que en lugar de la institución oficial exista otra institución que pueda desempeñar las mismas funciones, mejor y de otro modo, usted está ya cogido en la estructura dominante”
         Michel Foucault.
“Que yo sepa, no viajamos por el placer de viajar; somos imbéciles pero no hasta ese punto"                                                             Samuel  Beckett

Privilegios más, privilegios menos. Las divisiones sociales se miden por las condiciones de acceso a posibles y a la inevitable ignorancia de cómo dichas condiciones se dan en nosotros. Sólo así se crean las mistificaciones sociales que todo cuerpo social alimenta, que tienen cómo única finalidad salvaguardar el orden social al menor costo. Exceso de miedo.

En un principio (así reza el primer post) éste blog tenía por finalidad exponer los avances, inquietudes y errores de cada uno en el camino de tesis. Los tiempos de gloria de los blog ya pasaron y ahora reinan otras plataformas tecnológicas de comunicación, es mejor así.

Quiero exponer los inicios de lo que espero sea a mediados de año mi investigación para optar al título de antropología. Me centro en el análisis de los cuerpos trasexuales (no confundir con travestismo, eso es harina de otro costal), principalmente en la forma que dichos cuerpos son colonizados políticamente por las instituciones de poder (principalmente el Estado) despojándolos como cuerpos de enunciación sociopolíticamente legítimos y agentes de creación.

Dicha represión jurídico-médico-familiar distribuye secuencias de sentido que administran socialmente la articulación de prácticas y significados que median culturalmente la existencia entre un cuerpo y el mundo. En un primer lugar analizo las relaciones que el Estado dibuja políticamente sobre los cuerpos transexuales unidos en movimiento en tres campos de efectuación política: a) el médico, b) el jurídico y c) el familiar. Estas tres instituciones de poder instauran un sistema político que delinea un régimen del sentido completado espacialmente en tres grandes líneas articuladas: a) organización, b) significación y c) subjetivación que tienen por función acoplar conceptos (estados cognitivos de representación simbólica) con afectos (convergencia y consistencias de intensidades emocionales ligaadas a ideas que llenan al cuerpo limitándolo en acto) que estructuran una autoorganización corporal en línea con las líneas sociales imperantes que rigen lo real.

Si los análisis que buscan develar las lógicas antropológicas que habitan cada espacio social han sido metafóricamente comparadas con escenarios teatrales de representación simbólica, se debe al hecho importante que las mistificaciónes, la illusio bourdiana o la conocida ilusión social con la cual soñamos despiertos  habitando un espacio fuertemente recargado de rituales, regulan los contactos públicos entre cuerpos dotados de distintos rangos y sentidos, por la pura necesidad de poder ordenar o de ordenar por el poder.

El movimiento trasexual emerge desde la frontera de la dominación masculina y tal como dice Scott: "cada grupo subordinado produce, a partir de su sufrimiento, un discurso oculto que representa una crítica del poder a espaldas del dominador". Un movimiento tiene como finalidad emitir enunciados y prácticas que subviertan el régimen de significación dominante, que los excluye por definición y que permite resquebrajar la continuidad sociopolítica de un espacio a través de desafíos simbólicos que aumentan las leyes de combinación (Melucci) que reorientan al régimen de sentido reinante.

Un grupo dominado tan completamente sólo puede actuar no tan solo para subvertir al régimen cultural, sino además para cambiar de afectos en donde la tristeza es la manifestación existencial de una estructura sociocultural, que actúa combinando instituciones de poder que refuerzan la represión, excluyendo a los grupos en cuestión de la creación de lenguajes y prácticas propias dentro de la lucha social.